Existen algunas ideas equivocadas acerca de la cirugía de obesidad que es importante explicar y elaborar más en detalle para que los pacientes potenciales cuenten con la información correcta al momento de evaluar si estos procedimientos son adecuados para ellos. Algunos de estos mitos son:


La cirugía de la obesidad es muy peligrosa

La cirugía bariátrica, como cualquier otra cirugía, conlleva riesgos. No hay ninguna cirugía sin riesgos, ni siquiera mínimos, pero los riesgos de una manga gástrica o de un bypass gástrico están plenamente identificados y cuantificados, y estos tipos de procedimientos se realizan actualmente con el mismo nivel de riesgo que el de una cirugía de vesícula por ejemplo. Según la ASMBS, los riesgos de padecer obesidad severa superan los riesgos de la cirugía metabólica/bariátrica para muchos pacientes. El riesgo de muerte asociado con la cirugía bariátrica es de alrededor del 0.1% y la probabilidad general de complicaciones graves es menor del 4%.


La cirugía es una inversión muy costosa 

No es ningún secreto que el costo de la cirugía de obesidad no es muy accesible pero a largo plazo es la mejor inversión. Al comparar el costo financiero y de salud que conlleva padecer obesidad y sus enfermedades derivadas contra el costo de la cirugía es evidente el valor de este tratamiento. Las estimaciones sugieren que los costos de atención médica se reducirán en un 29% dentro de los cinco años posteriores a la cirugía. A la larga, el ahorro obtenido en medicinas que se dejarán de consumir, estudios y costos generales de salud es mucho mayor que el costo inicial de la cirugía.


La cirugía es mágica y no puede ser boicoteada

La cirugía es una herramienta muy efectiva que ayuda a resolver el exceso de peso pero no es una “cura”. Es una ayuda muy grande y efectiva que permite a las personas reducir la ingesta de alimentos y absorción de calorías, pero debe de ser seguida por una toma de consciencia y un cambio de los hábitos alimenticios de por vida que permita explotar al máximo los beneficios del tratamiento. 


Se vuelve a recuperar el peso perdido

Si bien es cierto que existe una posible reganancia de peso alrededor del segundo a quinto año después de la cirugía, es mínima y no sucede en todos los pacientes. Los estudios muestran que puedes tener éxito a largo plazo si sigues los cambios de estilo de vida y las pautas recomendadas. En promedio, cinco años después de la cirugía, los pacientes mantienen el 50% de su exceso de peso perdido.


La recuperación es larga y deja una gran cicatriz

Actualmente, la cirugía es mínimamente invasiva y se realiza por laparoscopia, lo que significa que tendrás incisiones muy pequeñas de cerca de 5 mm con un muy buen resultado estético. Ésta técnica también significa un menor tiempo de recuperación y dolor, podrás caminar rápidamente y regresar a trabajar en una o dos semanas aproximadamente.


Cualquier técnica resuelve el problema

Cada pacientes es diferente y requiere de una evaluación para saber qué procedimiento es el más adecuado en base a su tipo de obesidad, su índice de masa corporal y condiciones asociadas. Existen diferentes procedimientos para tratar la obesidad, como la manga o bypass gástrico, y usted y su cirujano tendrán que seleccionar el más adecuado para usted.


Éstos son solo algunos de los diferentes mitos que circulan acerca de la cirugía de obesidad y que muchas veces dan una idea equivocada a las personas que están considerando este tratamiento. Si bien es verdad que la cirugía bariátrica conlleva riesgos como cualquier otra cirugía en la actualidad, sus beneficios físicos, psicológicos y económicos son mayores.


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